miércoles, 24 de septiembre de 2014

VANGUARDIA

    Hacía mucho tiempo que sobre la mesita de centro reposaba la taza que contiene cien años. La presión de unos dedos arruga un poco el recipiente… Más tarde, está ajado por completo.

     Desde la esquina, una persona desnuda observa la taza que ya dejó en paz… Su piel se halla removida por el esfuerzo.



     Todo, es el reflejo del cuadro que dejó de pintar.



     Para conseguir, el presente.

 




miércoles, 10 de septiembre de 2014

MADURACIÓN

     En Bakú lo azul se revolcaba entre las olas. Frente al mar, lo ocre abatía con su sola presencia las paredes de las casas… Despaciosa, transcurría mi guardia.

     El otoño deambulaba por las innumerables mesas de billar ubicadas a lo largo del puerto. La humedad, colgando de todas partes, a punto, de precipitarse.

     ¡Vacío dispuesto!

     Las calles se recogen encerrándolo todo a la fuerza y, más tarde, se estiran hasta morir.
     Con ilusión juego solo en una de las mesas, el viento helado aviva mis anhelos y a otros jugadores, dispersos.
     Aunque los afanes quemaran, continuábamos jugando.
     Hacerlo, era esperar.

     A nuestro lado el Caspio, agitándose muy alto para entrechocar sus letras.
     A este lado de la cortina agitada, el mar, nosotros aguardando.

     Y a nuestro sitio, lentamente, lo amorataba la espera.